Cae la noche en las afueras de Tonambuctú. Tu aliento quema y las yemas de tus dedos, escapan de ti en un afán urgente por alcanzar la cumbre de un destino largamente
soñado. Cae
la noche en las afueras de Tonambuctú.
Vienes hacia mí en un deseo infinito de alcanzar lo sublime
Me abrasa tu mirada y sin embargo,
empieza a erizarme la piel el frío en esta noche de arena. Cae
la noche en las afueras de Tonambuctú.
Pero en mi boca ya
se han dejado prender las amapolas.
Las horas duermen.
Imagen: Ramón Vilanova
No me queda claro qué ropa debo de echar en la maleta para visitar Tonambuctú. Creo que quema y hiela, todo a la vez. Eso no me convence. Se parece demasiado a la vida.
ResponderEliminarBeso-te.
Las noches en el desierto son verdaderamente frías, sobre todo cuando es una noche de arena.
ResponderEliminarMe encanta esa figura final: "Las horas duermen.
Nosotros nos quedamos despiertos" Me parece muy sensual.
Precioso Tecla, insuperable.
Muchos besos.
estar despiertos en la noche suena precioso, que duerman las hora mientras vosotros..... huy huy.
ResponderEliminarbesitos.
Larisa: Vístete con tu piel.
ResponderEliminarTonambuctú es un lugar extraño y se deja hacer. Siempre será lo que nosotros queramos que sea y como sea.
ResponderEliminarTonambuctú en mí, es un producto de mi mente.
Gracias Pluma, te pienso.
Nos hace falta, Ana, visitar Tonambuctú, después de la que nos ha caído estos días de auténtica pesadilla.
ResponderEliminar¿PROPONES EL NUDISMO? ¿LA DESVERGÜENZA? ¿LA INDIGNIDAD?
ResponderEliminarLo que dijo el poeta: todos gentuza.
schissssssssss
ResponderEliminarNo digas eso. Estamos en Tonambuctú la suciedad no existe.
Venir vestida con tu piel es lo más limpio y puro con que se puede vestir cualquier persona digna de ser tal.
Las otras ideas, quedan para los cerdos. Con perdón por los cerdos.
me gusta la apuesta. Propones un lugar de nuestras mentes, e imágenes hermosas que lo acompañan...
ResponderEliminarseguis siendo tan genial como siempre Mejo...
es casi hipnótico leerte, empiezo y no paro! =)
Tonambuctú...pura pasión....bss
ResponderEliminarAllí donden duermen las horas, alejados del húmedo calor del destino, y donde permanece despierto es deseo infinito de los cuerpos, no puede ser lugar de quimeras, sino dulce licor de amapolas...
ResponderEliminarSólo por haberlo inventado tú, no podría ser de otra manera.
Besos, mi niña.
¡Tan despiertos! Es la poesía de arriba, que con esa luz de amapolas, no nos deja dormir.
ResponderEliminarFelicitaciones, tec
Saludos blo
¡Qué bella la poesía, la noche y esta manera de estar sin que te afecten las condiciones del exterior! Bueno un poquito el frío...
ResponderEliminarSiempre veo ese amor tan impulsivo, tan primer amor, como aquella escena de West Side Story en que María y Antonio se quedan bailando como si estuvieran solos en la pista, con su amor y nada más, nadie más. Es bello, exclusivo.
Un beso.
Las horas duermen, pero pronto llegará el alba.
ResponderEliminarSaludos y un abrazo.
Esperanzador. Claro. Bello. Cálido. Dulce. Sensual...Preciosa entrada donde los sueños son posibles. Bravo, Tecla.
ResponderEliminarUn beso gordote
Despiertos y esperando…que las horas despierten, que el frío se deje convencer por el aliento, que las amapolas prendan…
ResponderEliminarCae la noche y lo que antes se veía tan claro, ha desaparecido. Quizás algún rayo de luz se apiade y deje su esperanza a los amantes despiertos.
Besos mi Poetisa inspiradora.
Que bonito Tecla,echaba de menos tus poesias.
ResponderEliminarUn besico
Amor y deseo dos imaginarios siempre en busca de la perfección.
ResponderEliminar"Nosotros nos quedamos despiertos"
ResponderEliminares una línea que aporta mucho al contexto general.
...Como quedarse despiertos a despertar. Lindo sueño.
Saludos teclita.
Querida amiga en Tonambuctú todo es posible,un lugar donde vale la pena permanecer despiertos,que duerman las horas, ahí no importa el tiempo.
ResponderEliminarBella imagen de Vilanova.
Abrazosssss.
Sensualidad a raudales, sensualidad expectante ... esas yemas de los dedos con su urgencia ...uffff ...y en el mágico Tonambuctú. Quién fuera y estuviera ...
ResponderEliminarUn beso, amiga. Siempre un placer acompañarte, aunque me ausente a grandes ratos ...la vida y sus prisas, y sus realidades ... ya sabes ...