Inquietante Beatriz
Baila, baila, baila
No pares de bailar y miéntele a
los montes, a las calles, a la vida,
que yo te observaré
debajo de tu falda
debajo de tu falda
hasta encontrar el camino que tus
pasos me aconsejen
Gira y gira
hacia donde la música te lleve, y
los pinceles, ay
tus pasos de colores.
La paleta donde buscas
-¿Qué buscas removiendo
pigmentos?
¿Qué demonio escondido que vivir
no te deja?
Baila, baila, Beatriz
esa danza del vientre que
desprende el aroma de tu vida recóndita
y tus pasos oscuros
dolientes.
Beatriz
Ay, de tus pasos.
Imágenes: Mujeres que nos miran de Beatriz Rodriguez Hornero