
Margarita Yolanda Jimena Inmaculada de los cinco sentidos.
La de los buenos días,
va por la calle vestida con las sábanas
que cubrieron su amor
la noche antes de que llegara el día de la fiesta.
Sábanas marfileñas
que van dejando un rastro a perfume de nardo transparente
como de un color de vestido de novia
que camina descalza hacia el altar de las inmolaciones.
Margarita Yolanda Jimena Inmaculada de las tardes alegres y livianas.
La de los buenos días,
camina descalza vestida con su piel
desfilando a solas por las calles
dormidas
en una algarabía de risas y de espejos
que bailan alrededor de la lumbre
entre copas de licor bendecidas
por los dioses
–¡Margarita!
Vente conmigo al mar.
Y Margarita no responde
Ella se baila sola.
Imagen: Óleo de Monserrat Gudiol