domingo, 27 de septiembre de 2009


PEQUEÑOS POEMAS ENCADENADOS


Hoy es el último día
De todo cuanto tengo en mis bolsillos
Total:
Para un céntimo de euro que me queda
me compro castillos en el aire
Y ya no me preocupo más por el dinero.

 Hoy es el último día
de todo cuanto me queda en mi alacena.
Un rincón en el mar
Un extraño recuerdo.

Los dejaré en la playa


Y que las olas los arrastren
hasta el país de nunca jamás.
Y así no volverán a torturarme tus palabras.


Hoy es el último día
de todo cuanto me queda en mi maleta.
A fin de cuentas,
no pienso emprender ningún viaje.


Ni acercarme a tu puerta
y que la cierres.


Si es que no quieres verme
para qué viajar.


Me sentaré a la puerta de mi casa.
Y así veré pasar
el cadáver de mi enemigo.


Hoy es el último día
de todo cuanto me queda en los bolsillos.
Como no tengo nada
No me preocupa nada.


Caminaré descalza.
Y sentiré a la Tierra acariciándome las plantas de mis pies.
Y la música aquella
que siempre me hace bailar como una loca.


Hoy es el último día
que pienso subir las escaleras.


Si tengo que bajar
por qué ascender tan alto.


Nos sentaremos juntos junto al mar.
Y cantaremos todas las palabras que sepamos.
Acurrucados el uno junto al otro
Diciéndonos poemas.


¿Te imaginas?


El canto y la palabra
son los afrodisíacos del mundo.


Para qué queremos subir las escaleras
Si ya estamos aquí.


Donde queríamos.




***

miércoles, 16 de septiembre de 2009

DEBAJO DE TU PIEL



Debajo de tu piel corre la música
como si fuera un río subterráneo


Y allí,
justo allí,
donde la música corre buscando tus venas,
he puesto mis maletas,
porque que si te marchas,
quiero estar contigo donde quiera que vayas.

*
Debajo de tu piel,
he dejado un mensaje escondido,
para que si te encuentras solo y no tienes mas caricia que la tuya,
que sepas que yo estoy allí
siendo tu caricia.

*
Debajo de tu piel,
he guardado un recuerdo
y que no tengas que buscarme cuando me eches en falta.

*
Me necesitarás cuando salga el sol y no brille en tus ojos.
Me necesitarás cuando vayas a dormir
y descubras que ya no tienes sueño.

*
Me necesitarás
cuando mires tus manos
y veas que están vacías.
*

Pero si lloras porque ya no estoy contigo,
mira debajo de tu piel

que allí me encontrarás buscando tu sombra.
*

viernes, 11 de septiembre de 2009

TU TIEMPO ES AHORA




Cuando en la madrugada te llamen mis recuerdos
No me hables de ayer
Ni de mañana
Que no se puede vivir de los recuerdos.

El tiempo
es
ahora

Ven
Que aquí tengo mis ojos,
esperándote
Con las puertas de mis fuentes abiertas, invitándote a pasar
Y mis sandalias olvidadas en el suelo
para que mis pies acaricien tu cintura.

Cuando la madrugada te desnude con el frío de la noche
Vuelve
Que yo tengo mis brasas encendidas para aliviar los temblores de tu vida
Y las yemas de mis dedos
gritando dolorosas por tocarte
ávidas
de tu sudor y tus urgencias.

Cuando en la noche te busquen mis recuerdos
No vengas a buscarme
Que los recuerdos son sólo y nada más que aire y humo en el vacío.
Llanto aburrido en medio de la nada.

El tiempo es ahora.

Ven
Que tengo mis sandalias olvidadas en el suelo
Y mis pies soñando en tus orillas
Mientras te pierdes por los abismos de valles y montañas
Tu tiempo es ahora.

Habítalo

lunes, 7 de septiembre de 2009



TE PERCIBO

Te percibo
en las entrañas de la tierra
Soñando conmigo a todas horas.
Entrando en las raíces de las plantas
hasta encontrar el fondo y penetrarlo,
por la savia, por mis venas, por mi aliento, por mis cinco sentidos.

Te percibo
en el fondo de los mares,
jugando a agazaparte
entre la oscuridad de las aguas más profundas
Procurando que lleguemos a ser peces
para habitar juntos en el vientre de la ballena
y amarnos allí
donde nadie nos encuentre.

Te percibo
en el aire,
volando como pájaro perdido,
en busca de la luz
o esperando la madrugada que nos traerán las golondrinas.

Te percibo despacio,
jugando con el fuego, bebiéndote mi aliento
gustando mis licores,
mientras tus manos dibujan mis orillas.

Te percibo en la lluvia que moja los campos,
y reluce en las aceras.
La que convierte en mágica la noche
Y pinta miles de lunas en los charcos.

Te percibo sangrante en las yemas de mis dedos.
En las palmas de mis manos
En la lluvia de mis ojos
Y en los caminos imperecederos de tu frente.

Te percibo en mis sueños,
como a la eternidad.

Viajando en las estrellas.
Subido a mis tacones.
Cruzando los puertos que merodean mi cintura

Yo te percibo amor
Como la fuente percibe al manantial
Como la noche percibe a la mañana
Como yo sola soy capaz de percibir
Y nadie más.

viernes, 4 de septiembre de 2009



Y SIN NINGUNA CAUSA

Yo estaba aquí, tu estabas allí
Con el océano debatiéndose por medio
Y de pronto
Tu estabas aquí. Y yo estaba aquí.
Los dos éramos uno
El milagro fue posible.

Tu estabas allí
Yo estaba aquí
Y por ese milagro de la vida
se abrió la sombra de las madreselvas.
Salvando los abismos, las distancias
Y las miles de entelequias que conseguían separarnos.

Y yo estaba allí
Tu estabas allí
Los dos éramos uno
Durmiendo nuestra risa junto a los manantiales.
Respirándonos
el uno junto al otro.
Confundidos
Exhaustos
Sin saber quién era quién
Ni falta que nos hizo.

Y sin ninguna causa.
Yo estaba allí, donde tú
Y tu estabas aquí
Dónde nadie
Hablándome con la lengua de las piedras
Lanzándome al vacío y a la Nada.
Alejados del amparo de las madreselvas
Cada cual en el otro lado del mundo.

Y aún así
Siempre estaré ahí.


Donde estés tú.